Los hombres a menudo piensan que si no disfrutan euforia sexual con su pareja, la van a encontrar si cambian de pareja o si buscan muchas mujeres para tener encuentros sexuales. Es una creencia falsa y una expectativa irreal. El hombre que no aprende nuevos métodos para modificar el estilo de sus encuentros sexuales, llega al mismo aburrimiento con la nueva pareja que con la anterior.
Ese es uno de los hallazgos que George Moufarrej comparte en su libro "Sexual Euphoria" (Euforia Sexual), resultado de sus investigaciones sobre los problemas en las relaciones de parejas. Moufarrej, en entrevista con Huffpost Voces, indica que muchas relaciones de pareja terminan por falta de entusiasmo en su vida sexual, aunque atribuyan su fracaso a otras causas.
“Después de un tiempo juntos, las relaciones sexuales de tornan aburridas y se reduce la frecuencia de los encuentros porque son menos excitantes. La pareja se torna irritable, se alejan emocional y físicamente, empiezan a tener malentendidos en las demás áreas de su vida y acaban divorciándose. Si permanecen juntos 20 años, ya a ese punto han descuidado su vida sexual y lo quieren arreglar teniendo una aventura. Esa no es la solución porque a la larga, el problema continúa o empeora”, indicó.
Hay hábitos y creencias sobre la sexualidad, que impiden la sensación de excitación y entusiasmo que se busca en el sexo. También hay formas de combatirlos:
- La mayoría de las parejas creen que 2 minutos de juego preliminar son suficientes para iniciar el encuentro sexual. Mientras 2 minutos es el tiempo que le toma al hombre excitarse y tener una erección, la mujer necesita de 15 a 20 minutos para excitarse. Como resultado, la mayoría de las veces la mujer no logra un orgasmo y, con el tiempo, se aburren los dos. Si no hubo orgasmo, no hubo suficiente estimulación.
- Poca comunicación entre las parejas. Las parejas deben conversar todos sus asuntos y no evitar hablar de lo que necesitan hablar sobre todos sus temas, no solo el sexual. La buena comunicación desarrolla la intimidad emocional y eso propicia la intimidad sexual.
- Las parejas tienden a sentir que tienen seguro el uno al otro. Con el tiempo, no se tocan ni se demuestran cariño físico fuera de la relación sexual. Una vez se casan, piensan que el sexo es suficiente y no se acarician fuera de la cama. Eso va destruyendo intimidad. Las parejas tienen que demostrarse amor físico y verbal en cualquier momento.
- Las parejas asumen que el encuentro sexual terminó cuando el hombre tiene su orgasmo. Ese es un gran error. La mujer tiene que tener un orgasmo cada vez que tiene un encuentro sexual. Al hombre: hay maneras de asegurarse de que la mujer recibe estimulación en el clítoris y tiene un orgasmo.
- Se cree que el encuentro sexual terminó cuando el coito termina. Falso. Después del coito, debe haber una fase de 4 a 5 minutos abrazándose y arrullándose. Ese es el tiempo que le toma al cuerpo de la mujer volver a su estado natural después de la excitación; al hombre le toma un minuto.
- Cuando el hombre se levanta de la cama enseguida después del coito, la mujer se siente vacía, como un pedazo de carne. Ella necesita sentir que se ocupan de ella y no sentirse abandonada, después de un momento de pasión. Esa conducta la indispone para la próxima ocasión. Si quiere conservar el entusiasmo, el hombre no debe levantarse corriendo a bañarse ni para salir, después de los 5 minutos sugeridos anteriormente.
- Para mantener viva la euforia sexual, en un solo encuentro se recomienda un cambio de 2 a 3 posiciones para aumentar la excitación. Más de 3 cambios reduce el placer.
- Hay una probada diferencia de géneros a recordar para mantener excitante una relación. La mujer necesita romance, mayor comunicación, expresiones verbales y físicas de cariño antes, durante y después del encuentro sexual. Ella requiere mayor estimulación emocional, mientras el hombre responde más a los estímulos visuales para excitarse rápidamente.
- ¿Por qué tantas mujeres fingen un orgasmo? Porque no lo pueden tener por ellas mismas y el hombre se enoja si ellas no tienen orgasmo, pero en su mayoría, tampoco las ayudan.
- La relajación que contribuye al placer es otra de las sugerencias para un encuentro sexual excitante. El placer aumenta cuando se inhala y se exhala por la nariz (no por la boca), desde el abdomen.
- La gente se preocupa por el tamaño del pene y de la vagina. Otro error. La vagina se expande o se contrae de acuerdo con el tamaño del pene.
- Se parte de la premisa que después de la menopausia a la mujer no le interesa el sexo, y ella misma se lo cree. La mujer tiene los mismos deseos sexuales a medida que aumenta su edad y puede estar sexualmente activa. Es más, no tener actividad sexual va en detrimento de su salud física y mental.
¿Qué otras sugerencias ofrece Mouffarej para mantener encendida la llama?
- Aprende a usar el sexting
- Usa tu vestimenta para entusiasmar
- Cambia tu manera de hablar durante el encuentro sexual
- Insiste: tóquense y bésense en cualquier momento, y antes, durante y después del encuentro
- Utiliza telas y otros materiales para tocar y excitar a tu pareja
- Ten en cuenta la comida y la bebida antes y durante el acto sexual.
Durante décadas, la psicología ha reconocido la influencia determinante de las relaciones sexuales en el éxito matrimonial. Una vida sexual no satisfactoria ni excitante es reflejo de problemas más profundos en el matrimonio. Y a pesar de que vivimos en un mundo lleno de información, las parejas cometen los mismos errores y tienen los mismos problemas sexuales desde cuando se empezó a estudiar la sexualidad científicamente. Esto y querer ayudar a la gente a disfrutar mejores relaciones de pareja fue la motivación del periodista Mouffarej en la publicación de "Sexual Euphoria".
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